¿"La Peña del Profe"?
En mi tierra natal, mi Cuba bella, una peña es un espacio para compartir con cierta frecuencia, inclusive de forma periódica: semanal, mensual, etc. El anfitrión propone y los asistentes participan, intercambian, enriquecen, debaten, preguntan, responden, y un largo etc., todo bajo el hilo conductor que fue planteado. Hay peñas literarias, musicales, sobre teatro o plástica, de debate político, en fin… Peñas.
Pero el público también puede proponer cosas, y que estas sean implementadas como parte de la peña. Puede pasar “de todo”: por ejemplo, que un trovador cante una pieza y una persona del público le haga la voz segunda (lo he vivido), o que un poeta lea uno de sus nuevos poemas y alguien del público declame de memoria otro anterior del mismo autor (Ídem). Y cómo no, que algunas piezas musicales generen una sabrosa rumba ahí mismo; he sido parte del hecho, de un lado y del otro.
Dependiendo del lugar, la peña puede o no incluir algún consumo, sólido o líquido; y este último, puede incluir o no algún ligero toque etílico. No es lo más frecuente, pero pasa. Hay peñas y peñas.
Este espacio donde me estás leyendo es mi nueva peña online, creada y gestionada bajo mi propio dominio homónimo -profesorestrada.online-; una peña que también puede ser tuya (y ojalá decidas asumirla como tal: serás MUY BIENVENIDO). Aquí propondré sistemáticamente nuevos contenidos sobre diversos temas en que trabajo desde hace décadas hasta hoy (son unos cuantos), y recopilaré todos los que pueda encontrar de los muchos que tengo “regados” por la red, y que todavía tenga sentido recuperarlos tras tanto tiempo desde su “parto”. Empecé a escribir en blogs en 2006, y desde entonces hasta 2020 debo haber tenido unos 7 u 8; así que puedes imaginar la de cosas mías que andan por ahí. Ya estoy haciendo “arqueología bloguera” con ese objetivo. Pongo el tope 2020, porque ese año inicié un proyecto personal de investigación sobre nuevas plataformas de blogging, que me ha llevado a conocer y explorar más de 100, y a escribir en más de 40; esta donde hoy me lees (Micro.blog) la descubrí en dicha investigación. Dedicaré un espacio de la peña a ese proyecto bloguero.
Y por supuesto, cada vez que publique algo, sea nuevo o recuperado, sea original para este blog o un repost de lo escrito en otro (de los varios que tengo y más o menos mantengo), lo difundiré tanto aquí como en las poquísimas redes y grupos que conserve, para ponerlo a tu alcance y que podamos “hacer peña” (conversar) al respecto. Dije “que conserve”, porque estoy en un proceso de “desalgoritmización” paulatina y progresiva: saliendo de cada vez más espacios “sociales” gobernados por los m… perdón, benditos algoritmos (redes, grupos, “comunidades”), y enfocándome cada vez más en construir una presencia online sana, sociable, respetuosa de mi tiempo y el ajeno, productiva, contributiva y sostenible, que NO DEPENDA de ellos. Y por supuesto, ¡te recomiendo lo mismo! ¡Cuánta paz, cuánta salud mental, cuánta creatividad despierta y desbordada!
Ahhh, casi lo olvido; fuera del ámbito profesional y académico, la peña también incluirá verso, prosa y trova, en una zona del sitio que se llamará “La Poetrova” (ese proyecto ya fue lanzado en vivo en mi Universidad hace un par de años, cuando cumplí 60, y tengo varios videos trovando ese día). No quiero dejar fuera de mi peña nada que haya creado en mi vida hasta ahora, o cree en lo que resta de ella. Ojalá sea mucho, claro está; Dios lo permita, porque estoy repleto de energía, me siento joven y pleno, y me quedan bastantes cosas por hacer y crear.
¡Bienvenido a “La Peña del Profe”, que también es Tu Peña!